«Monsiváis también fue un buen ‘monero'»

Como un “monero” de hueso colorado que a través de sus palabras retrató la vida de México, definieron los caricaturistas Rafael Barajas “El Fisgón”, Antonio Helguera y José Hernández, al destacado escritor Carlos Monsiváis (1938-2010).

Durante la mesa redonda “Ese personaje de historieta: Carlos Monsiváis”, realizada ayer en el Museo del Estanquillo, los participantes hablaron de la manera en la que Monsiváis igualaba con sus palabras y su personalidad la gracia de las historietas y las caricaturas políticas, informó el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

Rafael Barajas aseguró que el destacado intelectual mexicano fue un personaje de historieta que tenía superpoderes; “comenzando por una súper memoria, una súper capacidad de trabajo, pero además era un tipo súper chistoso”.

Confesó que siempre trató de explicarse cómo Monsiváis podía dominar tantos temas, entre ellos el cine, del que podía saber desde los nombres de los actores secundarios hasta los diálogos y títulos de películas desconocidas.

El caricaturista recordó que el humor de Monsiváis aprovechaba cualquier situación, ejemplo de ello, recordó, fueron los escándalos del Padre Maciel, acusado de pederastia y en una conferencia surgió el tema.

“Una señora se paró indignada entre el público y gritó: Oiga yo soy de Los Legionarios de Cristo, a lo que Monsi respondió: ‘Mis más sentidas condolencias, señora”, refirió.

Asimismo, compartió con los asistes que otro de los talentos casi desconocidos de Carlos Monsiváis era el de imitador, pues copiaba la voz y personalidad perfecta de figuras como Octavio Paz (1914-1998) y Alfonso Reyes (1889-1959), así como de su madre, “pues Monsi solía contestar el teléfono con la voz de una ancianita cuando deseaba salvarse de un compromiso”.

A tres años de la partida del célebre intelectual mexicano, “El fisgón” confesó que sigue haciendo falta el gran “cronista de la Ciudad de México”: “Carlos Monsiváis sí fue un tipo con súperpoderes, sí fue un personaje de historieta, pero creo que ninguna historieta le podría hacer justicia… la verdad, lo extraño un chingo”.