Dime qué bebes y te diré cómo eres
Written by Janito on 5 mayo, 2024
Tu copa dice más de ti que el horóscopo.
A lo largo de tus noches de joven y ya no tan joven galán buscador de experiencias te habrás visto en una de estas: charla con una joven (y no tan joven) amigable que en un principio parece ser adecuada e incluso atractiva hasta que, cogida ya la inercia de la confianza, suelta un «¿eres Aries, verdad? Os huelo a kilómetros. Yo es que soy un poco bruja, ¿sabes?». Semejante declaración supone todo un jarro de agua fría a las ilusiones que hubiésemos podido depositar en ella (y de noche pueden ser muuuuchas), pero no porque nuestro lado ilustrado denoste a los creyentes en la astrología: quiénes somos nosotros para juzgarla si son más los que creen que los economistas y banqueros saben algo. Si es decepcionante es porque, puestos a usar indicadores express de personalidad, hay uno mucho más atinado: el alcohol espirituoso con el que combustionas tu ingenio nocturno. Esto es lo que tu copa dice de ti sin necesidad de hablar a través de ti.
1. Gin Tonic
Hace unos años un socio y amigo me dijo que la combinación de ginebra desconocida, tónica y cualquier tipo de vegetal que jamás echarías a ninguna otra bebida era la moda definitiva. En aquél momento te hacía parecer una persona madura y distinguida, capaz de sacar placer de los aspectos más amargos de la vida. Cinco años después, viendo a los bon-vivants de extrarradio pedir pepino en su gintonic de marca blanca servido en copa de tubo, me pregunto si no invoqué el mismísimo infierno iniciando, yo, esta moda.
2. Ron
El ron era lo que todos bebíamos antes del gin tonic, cuando este solo era el digestivo que tomaban ciertos caballeros para bajar el carajillo de sobremesa. En aquella época nos agradaban los sabores más dulces porque teníamos fe en el futuro y un hígado capaz de gestionar un alcohol sacado de la caña de azúcar mezclado con Coca-Cola. Si todavía lo sigues bebiendo es porque… a) Eres una chica que ha querido dar un paso de madurez dejando de beber Malibú-piña. b) Eres diabético y suicida c) Tienes una personalidad tan fuerte que no te importa quedarte solo en los botellones y que te llamen nenaza, nenaza.
3. Vodka
El vodka es el eterno aspirante a convertirse en la Nueva Gran Cosa, algo que jamás conseguirá por razones desconocidas. Pero en su favor hemos de decir que en los países el este está tan bueno que se puede beber solo, y que una bebida de su gradación cuyo nombre significa «agüita» se merece un 9/10 en Cuquez Alcohólica. Si eres fan, significa que eres un outsider, alguien que apuesta por el caballo equivocado por las razones adecuadas. Es como ser fan de Busquets, lo cuál tiene todo nuestro apoyo y admiración.
4. Whisky
Si bebes whisky, bourbon o cualquiera de sus primos, hay dos opciones. Que lo tomes mezclado con refrescos, lo cual te convierte en Alguien-Del-Que-No-Tengo-Nada-Que-Decir-Ni-Ganas. O que lo tomes solo, con hielo o con agua, lo que quiere decir que bebes zumo de madera y te convierte muy probablemente en el tío más interesante del bar y, con toda seguridad, en el que da mejores puñetazos en el mentón a librepensadores y poetas franceses.
5. Cualquier otra cosa
Sí, hay gente que bebe tequila con Red Bull, ponche con lima y vermouth con amaretto. También hay gente que se tatúa en el cuello. Ellos te dirán que lo hacen porque les gusta, pero todos sabemos que la verdadera razón es una personalidad débil que necesita dar la nota para autoafirmarse. Lo mejor es ignorarlos, hacer como que no existen, y si dan mucho la chapa, llamar a un bebedor de whisky.
6. Cualquier otra cosa si es el ruso blanco
Más allá de la nota «cinéfila» de la que todo el mundo ha abusado, el ruso blanco está hecho de licor café (BINGO) + vodka (mirar más arriba: BINGO) + leche (el líquido que hay dentro de las mujeres que no es sangre: BINGO). En su propia definición es un triple acierto, y encima resulta que está bueno y produce las intoxicaciones más gráficas y divertidas. Si es tu bebida de cabecera, sólo cabe decirte que eres Un Notas (jijiji).